Con motivo del terremoto de Chillán, ocurrido el 24 de enero de 1939, el pueblo mexicano y el Gobierno del presidente Lázaro Cardenas,

obsequiaron el edificio dela Escuela República de México, ubicado en la Avenida Libertador Bernardo O`Higgins Nº 250, frente a la plaza los Héroes de Iquique (conocida como  Plaza Santo Domingo).

A mediados del año 1940  llegaron a Chillán los pintores mexicanos David Alfaro Siqueiros y Xavier Guerrero. Ellos  dejaron plasmadas una de sus obras dentro del establecimiento.

Siqueiros, quien llegó a Chile precedido de fama y reconocimiento como uno de los grandes artistas mexicanos de su tiempo, pero también de polémica por su vehemente postura política, realizó en la biblioteca de la escuela un mural al que tituló Muerte al Invasor y en el cual plasmó su visión de la lucha histórica de ambos pueblos. Siqueiros dividió la escena en dos murales, uno Sur, que representa a Chile y uno norte que representa a México.

En el primero el muralista retrató a personajes como Galvarino, héroe mapuche con los brazos cortados como la figura principal, de quien emerge un cañón lanzando un grito de rebelión y libertad. A su lado aparece la cabeza del escritor e ideólogo chileno Francisco Bilbao, quien representa la fuerza de las ideas. A la izquierda, otros héroes indígenas como Caupolicán que dirige sus lanzas contra los conquistadores, y Lautaro, en el ángulo superior izquierdo, que con su clarín llama al combate, así como otros líderes chilenos como Luis Emilio Recabarren, el primer obrero líder y organizador de la clase trabajadora chilena. A la derecha, finalmente, Bernardo O’Higgins, el prócer de la Independencia, quien enarbola las banderas de la Patria Vieja, de la transición y la actual.

En el muro norte, la figura principal representa a Cuauthémoc, último emperador azteca, ascendiendo los peldaños de una pirámide. Rodean al gobernante un conjunto de piernas que representan la fortaleza y vigencia de las culturas mesoamericanas; y como contrapunto, a su derecha los débiles pies de un español abatido, y sus manos ensangrentadas como símbolo de la crueldad de la Conquista de América. En el ángulo superior izquierdo, aparecen personajes como José María Morelos y Miguel Hidalgo, líderes de la Independencia de México; y Emiliano Zapata, líder de la Revolución Mexicana. Bajo ellos, una Adelita, mujer soldado que representa la mujer del pueblo mexicano. Finalmente, los presidentes de Chile y México al momento de pintarse los murales, Pedro Aguirre Cerda y Manuel Ávila Camacho, aparecen en reconocimiento a su labor.

El 28 de Mayo de 2004, mediante el Decreto Supremo Nº 331 y con la presencia del Ministro de Educación Sergio Bitar fueron declarados Monumento Nacional de Chile patrimonio cultural.

Para el país constituyen un centro cultural de excepción y una fuente viva de turismo y de progreso para Chillán, tierra de héroes y de artístas, y que deberá protegerlos y divulgarlos al nivel de su alta y especial significación.